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| Villa de Martos- Atardecer - Imagen de Wikipedia |
Este es un compendio, de un libro del siglo XVI donde nos describe la historia de la Villa de Martos, interesantes descubrimientos arqueológicos en aquella época, por Don Diego Villalba.
Este artículo me lo enviò mi amigo, Manuel Ocaña, quien es originario de este pueblo y En esta oportunidad, copiaré un extracto de su transcripción.
"Sobre la Villa de Martos; El cerco de los Gazules y La historia de los hermanos Carvajales"
...De la manera que muchos caballeros y varones señalados de Constantinopla, Alemania y Francia y de otras provincias y tierras de cristianos vinieron a España a salvar las ánimas, peleando contra los moros infieles y ayudando en las conquistas y batallas a los reyes y principes cristianos españoles y a morir por el aumento y defensa de la fe de Jesucristo, así tambien vinieron príncipes y reyes moros de la pronvincia de Africa y Berbería, con sus gentes de a pie y de caballo, en defensa y servicio de Mahoma, para ayudar y favorecer a los reyes moros que acá en España reinaron; así se lee por las historias de aquellos tiempos haber venido grandes y poderosos reyes moros y Miramamolines de toda Africa y Mauritania, de Fez y Marruecos y de las partes de Libia y de Cartago con grandes ejercitos y poderes, y haber pasado acá en España para destruir todo y deshacer si pudieran el imperio y nombre cristiano. Entre los cuales, en tiempo del santo rey Don Fernando el tercero, vino y pasó de Africa a esta provincia del Andalucía un rey, señor de una gente valerosa, de unos moros alarabes llamados Gazules, con buen ejército de ellos, para ayudar y favorecer a los reyes moros en las guerras que se les ofrecieren, a los cuales, y a su rey fue dada en el Andalucía por el rey moro de Sevilla llamado Aben huc, una villa a quien llamaron Alcalá de los Gazules, donde este rey y sus moros morasen y habitasen, y asi por ello se llamó, y al presente se llama, de este nombre Gazules....los cuales fueron valerosos y esforzados caballeros y por eso muy temidos y celebrados en las conquistas de Andalucía, donde se señalaron mucho y pelearon valientemente en aquella nombrada batalla de Jerez, que el infante Don Alonso, hermano del rey Don Fernando y conde Don Alvar Perez, ganaron de los moros, en la cual fue muerto el rey de los Gazules...
...Pues estos moros Gazules juntaron grandes gentes con ánimo de hacer una señalada entrada y correr la tierra de cristianos y tomar primeramente por fuerza de armas las fortalezas de la Peña y Villa de Martos y desde allí ganar y conquistar de nuevo lo que tenían los cristianos en el Andalucía, y asi partieron con sus ejercitos y llegaron a poner cerco a la Peña de Martos, en cuya sazon y tiempo el rey Don Fernando estaba sobre Granada, y con él su hermano, el infante Don Alonso, maestre de Calatrava, y los moros, perseverando en su cerco, hicieron mucho daño en las comarcas de aquella tierra, y teniendo asi puestos en aprieto los castillos y fortaleza de Martos, los caballeros y comendadores de la orden, juntamente con los marteses vecinos de la villa, que todos estaban cercados, y con otra gente que se les había juntado, determinaron y acordaron salir a pelear con los moros al campo, y así juntos todos salieron y les dieron batalla con tanto ánimo y esfuerzo en un llano cerca de la Peña de Martos, que hoy dia, en memoria de esta hazana alli acaecida, se llama la Nava de los Gazules, la cual fue muy trabada y reñida batalla por ambas partes, y al fin los nuestros hicieron cosas tan señaladas y mataron tantos moros, que queriendo Dios Nuestro Señor ayudar lo flaco, hubieron una muy señalada victoria y fueron vencidos y desbaratados y cautivos todos los moros Gazules.... Entretanto, sabido por el rey Don Fernando, la entrada y cerco que tenían hecho los moros Gazules en la Peña de Martos, envió luego al infante Don Alonso y con el a los maestres de Calatrava y otra mucha gente, para que prestamente fueran socorridos los frailes y los marteses y cuando llegaron y supieron el vencimiento y crecida victoria que habían alcanzado, fueron muy estimados los marteses y los caballeros de la orden por hazaña y hecho tan señalado.
Estando el rey Don Fernando cuarto de Castilla, a quien comúnmente llama el Emplazado, en la ciudad de Jaén y usando rigurosa justicia y con falsa información y más con ira y enojo que con razón, mandó por sentencia que Pedro de Carvajal y Juan Alfonso de Carvajal, su hermano, que en su corte andaban, fuesen muertos y despeñados de la Peña de Martos porque fueron acusados ante él que en palacio habían muerto a Gómez Benavides, a quien el rey amaba mucho y era grande privado suyo, de la cual sentencia como injusta y que en la tierra no había juez ante quien pudiesen pedir su justicia y apelar a ella, antes de que fuesen despeñados, con lágrimas y suplicaciones dijeron que Dios era testigo y sabía la verdad de este hecho, y como ellos no eran culpados ni merecían aquella muerte, que apelaban de su injusta sentencia y le emplazaban que dentro en treinta días pareciese a estar a derecho y justicia ante Dios Nuestro Señor, para cuyo tribunal tornarían a apelar, y sin embargo de sus palabras y apelación fueron cruelmente muertos y despeñados de la Peña de Martos, y sus cuerpos echados y despedazados por aquella parte áspera de la Peña que cae a la banda de Occidente. Fué cosa maravillosa y digna de grande consideración, que el rey Don Fernando, estando en la ciudad de Jaén, y queriendo partir para Alcaudete, comió temprano y acostóse a dormir un poco la siesta, que era verano, y como fuese ya tarde y los suyos viesen que no se levantaban, fueron a la cama donde estaba acostado para lo recordar, y cuando llegaron halláronle muerto, sin que persona alguna le viese morir. Y así murio en la misma ciudad de Jaén, el postrero día de los treinta que por aquellos caballeros fue pedido a Dios Nuestro Señor, ante quien le citaron y emplazaron. Y por ser cosa tan notable en España y caso acontecido en la Peña de Martos, me pareció hacer aqui particular mención de él.
